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domingo, 7 de diciembre de 2014

Shamballa

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Desde el centro donde la Voluntad de Dios es conocida
Que el propósito guíe a las pequeñas voluntades de los hombres,
El propósito que los Maestros conocen y sirven.


La Gran Invocación es conocida a lo largo de todo el mundo. Ello indica el cumplimiento de la predicción de que se convertiría en una plegaria mundial para la nueva era.

La realidad de los grandes centros de energía del planeta también se está estableciendo paulatinamente como una posibilidad concreta y razonable. La Jerarquía espiritual del planeta, el "punto de Amor en el Corazón de Dios", ya está siendo reconocida por muchas personas. Puede transformarse en una realidad viviente para un creciente número de hombres y mujeres dedicados que sirven a sus hermanos.

Nos hallamos ahora ante la posibilidad de aproximamos al "centro donde la Voluntad de Dios es conocida", Shamballa. Shamballa es el centro coronario planetario, así como la Jerarquía es el foco para el amor y sabiduría de la deidad.

La humanidad no podrá emplear con sabiduría el poder inherente a la voluntad espiritual hasta que no haya aprendido a amar sin egoísmo, y a desarrollar la comprensión y la compasión por todos los seres. El poder de amar y de vivir de acuerdo a valores y principios espirituales expande la conciencia, evoca al alma y allana el camino hacia la comprensión de la voluntad y propósitos divinos.
 

  Pensamientos Claves 

Shamballa es simplemente una palabra que encierra la idea de un vasto punto focal de energías acopiadas y reunidas por el Logos planetario, con el fin de crear una manifestación adecuada a Su intención en desarrollo y al servicio planetario.

Shamballa es un estado de conciencia o una sensible fase de percepción donde existe una aguda y dinámica respuesta al propósito divino.

Shamballa es el lugar donde se halla el propósito, propósito que no puede ser comprendido hasta que el Plan sea conocido.

Shamballa no es un Camino, sino un centro mayor de estados relacionados, y una energía relativamente estática -energía que la enfocada intención del Gran Concilio, actuando bajo el ojo directriz del Señor del Mundo- mantiene preparada para propósitos creadores.

Shamballa es el punto de mayor tensión sobre el planeta, tensión que expresa voluntad amorosa inteligente, libre de toda autovolición o prejuicio mental.

Shamballa es el principal agente receptor del planeta, desde el ángulo de la afluencia solar, pero al mismo tiempo es el principal punto distribuidor de energía desde el ángulo de los reinos de la naturaleza, incluyendo al quinto. Desde el punto de tensión se incorporan y, finalmente maduran, mediante los procesos de evolución, el canon de la vida y la Voluntad del Logos planetario.

Shamballa es el centro coronario, simbólicamente hablando, de nuestra Vida planetaria, enfocando su voluntad, su amor y su inteligencia en una gran y fundamental Intención, y manteniendo ese punto enfocado durante todo el ciclo de vida de un planeta. Esta gran Intención personifica el propósito actual y se expresa por medio del Plan.

El único lugar de completa paz es "el centro donde la Voluntad de Dios es conocida".
 
La Paz como expresión de la voluntad de Shamballa, produce equilibrio, síntesis y comprensión, más un espíritu de invocación, siendo básicamente una acción que origina una reacción. Esto se manifiesta como el primer gran trabajo creador y mágico de que es capaz la humanidad, llevando los tres aspectos divinos a una actividad simultánea de acuerdo a la Voluntad de Dios.
 

  La Fuerza de Shamballa 

La fuerza de Shamballa, el fuego de la "Voluntad al Bien", está a disposición para ser empleada correctamente, pero el poder de expresarla reside en su comprensión y uso grupales.

Durante este siglo, esta fuerza ejerció su primer impacto directo sobre la humanidad; había influido sobre la raza humana en etapas anteriores, pero sólo luego de ser aminorada, filtrada y modificada por el gran centro planetario de la Jerarquía. Este impacto directo tuvo lugar en el año 1975 y en el 2000, y ocurrirá nuevamente en el año 2025, pero los riesgos no serán entonces tan grandes como en los impactos anteriores, debido a la madurez espiritual de la humanidad. Cada vez que esta energía incide sobre la conciencia humana, se manifiesta con mayor plenitud algún aspecto del Plan divino. Es la energía que introduce la síntesis, la que mantiene unidas a todas las cosas dentro del círculo del amor divino. Desde sus últimos impactos, el pensamiento humano, como nunca antes, ha incrementado su interés en el establecimiento de la unidad y en el logro de la síntesis en todas las relaciones humanas, y un resultado de dicha energía ha sido la creación de las Naciones Unidas.

La energía de Shamballa guarda relación con la vivencia o cualidad de vida de la humanidad, la cual se expresa mediante la conciencia y la forma. Atañe al establecimiento de correctas relaciones humanas, y es esta influencia, la que abre las mentes humanas a la realidad del Plan de Amor y de Luz.

El aspecto voluntad puede ser contactado sólo desde el plano mental, y por consiguiente, únicamente quienes trabajan con y a través de la mente pueden comenzar a apropiarse de esta energía. Aquellos que responden a la fuerza de Shamballa se aproximan estrechamente a la energía del fuego. El fuego es el símbolo y la cualidad del plano mental; es un aspecto de la naturaleza divina.

Tres grandes energías tienen su foco en Shamballa, la sede del fuego:

1. La energía de Purificación: es el poder, innato en el universo manifestado, que gradual y paulatinamente adapta el aspecto sustancia a lo espiritual. Ello implica la eliminación de todo lo que obstaculice la plena expresión de la naturaleza de la divinidad.

2. La energía de Destrucción: una destrucción que retira o reemplaza las formas que aprisionan la vida espiritual interna y ocultan la luz interior del alma.

3. La energía de Organización: esta es la energía que dio origen al impulso que produjo la manifestación. La relación entre espíritu y materia, cíclicamente y bajo la ley, crea el mundo manifestado como campo para el desarrollo del alma, y como un área en donde se realiza el propósito divino por intermedio del Plan.

La fuerza de Shamballa, por lo tanto, es el foco para la Voluntad al Bien, la cual conduce a las correctas relaciones humanas y al establecimiento de la paz sobre la Tierra.


  La Cooperación con la Voluntad al Bien 

El potente primer rayo de voluntad o propósito, está despertando hoy a la actividad, con su creciente efecto sobre las mentes y las "pequeñas voluntades" de los seres humanos. La respuesta es compatible con la cualidad de la mente y la intención de la voluntad humana.

Como demostración de la benéfica voluntad de Dios, esta poderosa energía tiende a destruir toda forma que impida el surgimiento de un mundo nuevo y mejor; actúa como una fuerza sintetizadora que produce la unión de todas las partes separadas de vida y conciencia. Ejerce un profundo efecto sobre el campo de la política, así como sobre la conciencia de quienes se ocupan de todos los aspectos del gobierno en cada nación del mundo.

La energía de Shamballa es una demostración de la Voluntad de Dios, en su poderosa vitalidad espiritual. La voluntad al bien anima a todo el proceso evolutivo, un proceso en el que la humanidad puede hoy participar inteligentemente. Una cooperación activa y efectiva es la que proporciona la meditación grupal. El tema de la voluntad al bien, la revelación de la voluntad divina, y la receptividad y distribución grupales de la fuerza de Shamballa, como una energía estabilizadora y sintetizadora en el mundo de los asuntos humanos, pueden crear un punto focal de meditación poderosamente evocativo.

La misma Jerarquía espiritual del planeta está interesada en el inminente impacto de la fuerza de Shamballa sobre la conciencia humana. Ahora, un gran número de hombres y mujeres pueden cooperar conscientemente con la Jerarquía en este acontecimiento planetario, mediante la meditación y el empleo regular y deliberado de La Gran Invocación.
 

domingo, 26 de enero de 2014

En busca del SHAMBALA.


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Queridos hermanos en la luz

Al realizar la investigación acerca de la matica Shambala, me acabo de enterar lo muy poco que sabía acerca de lo que ella significaba y me han surgido algunas preguntas ¿será que la mítica Shambala es la luz espiritual del mundo?, aquella de la que nos habla en su tan maravilloso libro Drumvalo Melquisedec, “Serpiente de Luz”, refiriendose a la energía espiritual Kundalini. Esta energía sagrada estuvo durante 13 mil años resguardada en las alturas de Himalaya, lo que actualmente es el Tibet, en la Gran Pirámide Blanca, por la Hermandad Nakkal y que ahora ha comenzado un nuevo ciclo de 13 mil años, alojándose en su nueva casa, tal y como lo había predicho el calendario Maya, ese nuevo lugar de descanso sagrado en la tierra, para la luz espiritual kundalini, es un lugar que transformará la zona de Chile y Perú en unos nuevos Tibet e India o ¿nueva Shambala? o ¿será que es el cambio de sistema que tanto estamos esperando a propósito del 2012?.

Te presento ahora mi investigación, aplica ahora tu propio discernimiento, lo importante es que todos los conocimientos que nos han entregado muchos seres iluminados en el planeta se están materializando ahora, y que juntos estamos creando con esa energía, luz espiritual, ese lugar edénico en el cual queremos vivir, la Shambala en todo el planeta.
Creando desde el corazón, luz y paz
Elizabeth

El Hinduismo, el Chamanismo y el Budismo, todos ellos conservan tradiciones que postulan a Shambala como la fuente misma de su religión. Por miles de años se han escuchado relatos acerca de algún lugar más allá del Tibet, entre los majestuosos picos y apartados valles del Asia Central, aquí persiste como un paraíso inaccesible, un oasis de sabiduría universal y paz, llamado SHAMBALA.

Como esos espejismos que en el desierto siempre están unos pasos delante pero el viajero sediento nunca alcanza, Shambala es un mundo escondido al cual parece imposible acceder. La antigua creencia budista dice así­: Para llegar, no es preciso contar con un mapa o guías avezados, sólo es necesario estar preparado Íntimamente.

Entonces, lo inefable aparecerá ¡ante la vista en todo su esplendor. ¿Es shambala el paraíso perdido donde habitan hombres perfectos, ¿la Kalapa de los hindúes? ¿Es el valle oculto de Kun Lun donde, según los chinos, viven seres inmortales? ¿Es la Tierra de las Aguas Blancas, la Bielovodye rusa, aquella de los santos ermitaños de gran sabiduría? ¿O es Chang Shambhala, el lugar sagrado de los budistas donde se encuentra la fuente de la eterna sabiduría? Es todos y no es ninguno. Como los espejismos, está ¡y no está ¡ Sólo espera al peregrino de corazón límpido y espíritu abierto para ofrendarle sus misterios.

Muchos mitos extranjeros han crecido alrededor de la leyenda de Shambala que se encuentra en la literatura Kalachakra. Algunos fueron extendidos para obtener apoyo militar o político, como la identificación de Rusia, Mongolia o Japó con Shambala. Otros aparecieron dentro de movimientos ocultistas y combinaban ideas budistas con conceptos de otros sistemas de creencias. Algunos incluso engendraron expediciones para encontrar la fabulosa tierra.

shamabala.jpgEs uno de esos reinos mítico que todos han buscado a lo largo de los siglos; una civilización superior social y tecnológica. El nacimiento de este mito existe tal vez en la necesidad que todas las sociedades tienen de creer en sociedades perfectas, en encontrar lugares mágicos donde no hay problemas y donde todo está avanzado de acuerdo a sus creencias.

Un lugar donde impera la paz espiritual, un paraíso perdido donde según los mitos budistas viven almas inmortales armónicamente con la Naturaleza.
Sin embargo, en Occidente el nombre por el que se ha hecho más conocido es el de Shangri-La, nombre que le dio James Hilton en su novela Horizontes Perdidos.
James Hilton construyó un mundo ideal, al que llamó Shangri-La (un nombre de su invención convertido al poco tiempo en sinónimo de lugar edénico). Estaba poblado por un grupo de elegidos provenientes de distintas partes del mundo y eran gobernados por un Dalai Lama muy especial: el misionero católico Francois Perrault, de la orden de los Capuchinos, que había arribado al Tibet en 1734 y seguía vivo hacia 1930, fecha en que transcurre la mayor parte de la novela.

Su descripción de aquel mundo, escondido en las más altas cumbres del Himalaya; aquel mágico poblado situado en las laderas de las montañas nevadas que de repente aparecían como lo hacen las visiones del desierto, se transforma con el paso de los años en la necesidad de creer que un reino así­ verdaderamente podía existir.

Cuando Hilton ubicó a su mítica Sangre-La en el Tíbet, los lectores occidentales de su novela fueron fascinados por ese mundo misterioso que desde antiguo había atrapado el interés de misiones y expedicionarios. Desde los principios del siglo XVI, los jesuitas intentaron llegar a esas altas mesetas cercanas del Himalaya donde se creía existía una antigua comunidad de primitivos cristianos.

Shangri-La es tan enigmático y evasivo como el mismo Tibet, donde lo ubicó el novelista. En el valle de la Luna Azul está el mítico reino intemporal de hombres sapientes y longevos. Un lugar en donde se contempla la salida del Sol mientras que los hombres del mundo exterior solo oyen la alarma del reloj que los reclama para sus urgentes obligaciones.



LA LEYENDA DE SHAMBALA

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Shambala no existe en el mundo físico. Existe en un realismo místico donde uno estudia con el maestro espiritual, quien se ha desarrollado del plano físico Tierra. Es un lugar donde uno puede aprender tales conocimientos del espíritu, con la unidad del universo.

Madame Blavatsky encontró el Budismo Tibetano en un momento en que los estudiosos orientalistas europeos estaban aún en pañales y había disponibles pocas traducciones o relatos. Es más, ella fue capaz de aprender Únicamente inconexos fragmentos de sus vastas enseñanzas. En sus cartas privadas, ella escribió que como el público occidental en aquel momento estaba poco familiarizado con el Budismo Tibetano, ella decidió traducir y explicar los términos básicos con conceptos más popularmente conocidos del Hinduismo y del Ocultismo. Por ejemplo, ella tradujo tres de las cuatro islas-mundo (cuatro continentes) alrededor del Monte Meru como las islas hundidas de Hiperbórea, Lemuria y Atlántida.

Asimismo, ella presentó las cuatro razas humanoides mencionadas en las enseñanzas abhidharma y Kalachakra (nacidos de la transformación, humedad y calor, huevos, y Úteros) como las razas de estas islas-mundo. Su creencia de que las enseñanzas esotéricas de todas las religiones del mundo forman un Único cuerpo de conocimiento ocultista reforzó su decisión de traducir de esta manera y se propuso demostrarlo en sus escritos.shambala.jpg

En 1888, Blavatsky mencionó Shambala en su principal obra, La Doctrina Secreta, las enseñanzas que según ella había recibido telepáticamente de sus maestros en el Tibet. Ella escribió en una carta que aunque sus maestros eran œbyang-tzyoobs oœtchang-chubs reencarnados (byang-chub en tibetano, boddhisattva en sánscrito), ella les había llamado mahatmas porque ese término les era más familiar a los británicos en la India

La localización por parte de Blavatsky de Shambala en el desierto del Gobi no es sorprendente ya que los mongoles, incluyendo la shambala-7.jpgpoblación Buryat de Siberia y los Kalmyks de la región del bajo Volga,eran fervorosos seguidores del Budismo Tibetano, particularmente de sus enseñanzas Kalachakra. Durante siglos, los mongoles de todo el mundo han creído que Mongolia es la Tierra al Norte de Shambala y Blavatsky estaba indudablemente familiarizada con las creencias Buryat y Kalmyks de Rusia.

Blavatsky podría también haber recibido confirmación de la situación de Shambala en el desierto del Gobi a partir de los escritos de Coma de Cros. En una carta de 1825, escribió a que Shambala es como un Jerusalén Budista y está situado entre los 45 y los 50 grados de longitud. Aunque creía que Shambala podría encontrarse probablemente en el desierto Kizilkum en Kazajstán, el Gobi también estaba comprendido entre las dos longitudes. Otros posteriormente la situarían dentro de estas latitudes, pero en el Turkestán Oriental (Xinjiang, Sinkiang) o en las Montañas Altái.

Ya lo decían las milenarias religiones de toda Asia al creer que en aquellas cumbres existan los manantiales de la Sabiduría. A Shambala se la conoce en Asia como el Reino Oculto, perdido en el Tibet, y habitado por seres perfectos que intentan proteger la evolución del ser humano y es considerado como la fuente del Kalachakra, que es la mayor y más esotérica rama del misticismo Tibetano. El buda predico las enseñanzas del Kalachakra a un conjunto de hombre Santos en el sur de la India. Más tarde, las enseñanzas permanecieron ocultas durante 1000 años hasta que un escolar hindú fue en busca de Shambala y se inicio en las enseñanzas de un hombre Santo que conoció a lo largo del camino.shambala-6.jpg

El Kalachakra permaneció en la India hasta que emprendió su camino al Tibet en el 1026. Desde entonces el concepto de Shambala ha sido ampliamente conocido en el Tibet, y los tibetanos han estado estudiando el Kalachakra durante los Últimos 900 años, aprendiendo su ciencia, practicando su meditación y usando su sistema de astrología para guiar sus vidas. Como un Tibetano ha preguntado ¿como pudo Shambala ser la fuente de algo que ha afectado a tantas Áreas de la vida Tibetana durante tanto tiempo y aun no existe? El Kalachakra Tantra es visto como la esencia y el corazón de Vajrayana

El primer rey de Shambala, Sucinda, una emanación de Vajrayana, recurrió a Buda Sakyamuni para dar lecciones acerca de Kalachakra. En el día de la luna llena del tercer mes, en la estepa de Dhanyakataka, en el sur de la India, antes de una reunión de innumerables Budas boddhisattva, Dakas, Dakinis, Dioses, magos y yakshas, el Buda se manifestó en forma de Kalachakra, trasmitió el completo poder y dio enseñanzas sobre este Tantra, que pertenece a la clase más profunda del Tantra.

Y seguimos con la leyenda que nos decía que la tecnología de Shambala era mucho más avanzada que la de nuestros mundos conocidos, y en la ciudad principal había unos ventanales que servían de telescopios y permitían ver la vida extraterrestre. Las fantasías y leyendas hablaban de vehículos que se desplazaban (hace siglos, no lo olvidemos) por túneles subterráneos, y de la facultad de sus habitantes de moverse a gran velocidad, trasladarse de un lugar a otro materializándose y desmaterializándose, además de tener una gran clarividencia.

Son curiosas las coincidencias existentes entre ambos reinos míticos, Atlántida y Shambala; tanto que hace pensar en la ficción de ambos, en la inexistencia de algo que jamás podrá encontrarse y que está más apoyada, en la necesidad de la fe en cosas superiores, en lugares y condiciones que están por encima de lo que tenemos ahora, y que en algún tiempo venidero podremos tener.

Los textos religiosos Tibetanos describen la naturaleza física del terreno místico con detalle. Se pensaba que parecía como un loto de 8 pétalos porque está hecho de 8 regiones, cada una rodeada por un anillo de montañas. En el centro del anillo mas interno esta Kalapa la capital, y el palacio Quingos, que está compuesto de oro, diamantes, coral y gemas preciosas. La capital está rodeada de montañas hechas de hielo, que lucen con una luz cristalina.

Señales extrañas en el Área donde parece ser Shambala, aportan la evidencia de su existencia. Los tibetanos creen que el terreno está guardado por seres con poderes sobrehumanos. A principios de los años 1900, un articulo en un periódico hindú, el Statesman, hablo de un comandante Británico que acampando en el Himalaya vio un hombre muy alto, vestido de claro, con pelo largo.

Aparentemente, sintiéndose observado, el hombre salto en la ladera vertical y desapareció. Para asombro del comandante, los tibetanos con quienes estaba acampado, no mostraron sorpresa con esta historia; explicaron al comandante que había visto uno de los hombres que cuidan de la tierra sagrada.

Mientras que la gente (especialmente los lamas Tibetanos) han estado buscando Shambala durante siglos, aquellos que vieron el reino dice la shambala-leyenda a menudo nunca volvieron, porque han encontrado el país oculto y han permanecido allí­ o porque han sido destruidos en el intento. Los textos Tibetanos conteniendo lo que parecen sus hechos históricos acerca de Shambala, tales como los nombres y fechas de sus reyes y registros de los acontecimientos correspondientes, ocurridos en el mundo exterior, dieron a los Tibetanos la razón adicional para creer que el reino existe.

Los recientes acontecimientos que parecen corresponder a las predicciones del reino mítico, añaden fuerza a su creencia. La desintegración del Budismo en el Tibet y el crecimiento del materialismo en el mundo, emparejado con las guerras y disturbios del siglo XX, todos se ajustan a la profecía de Shambala.

En esta tradición se habla de indicaciones, más o menos oscuras, para llegar a Shambala, pero queda ambiguo y difuso si se trata de un lugar físico, o se trataría solo de indicaciones simbólicas.

Otras versiones cuentan que todos sus habitantes alcanzaron la iluminación y en ese momento todo el reino desapareció del plano físico para pasar a existir en una dimensión espiritual. Sus gobernantes también velarán por los asuntos de la tierra y algún día regresarán para salvar a la humanidad de su posible destrucción.

Como Su Santidad, el Dalai Lama hizo observar durante la iniciación del Kalachakra de 1985 en Bodhgaya, Shambhala no es un país geográfico real:

“Aunque aquellos con una especial disposición espiritual puedan enlazar con el a través de una conexión kármica, Shambhala no es un sitio fí­sico concreto que podamos visitar o encontrar. Solo nos referimos a el como un lugar de pureza, una tierra pura en el reino de los humanos. Y aunque se pueda disfrutar de la gracia de una asociación kármica, no se puede realmente llegar allí­”

Este mito de constante mejora y desarrollo, que está con nosotros desde hace tanto tiempo, esta sin embargo ahora, alcanzando sus límites. Incluso los que piensan que han conseguido el bienestar que aspiraban, los que viven en barrios ricos u otros oasis de prosperidad, están experimentando una creciente sensación de vací­o, desnudez y falta de sentido que conduce a muchos de ellos a actos esporádicos de violencia y de autodestrucción. El mito del progreso parece, de hecho, habernos conducido a un degenerado periodo de materialismo que podemos pensar precede a la Edad Dorada que según el Shambhala, está por venir

La Teósofa británica Alice Bailey (1880-1949) era una médium que afirmaba canalizar y recibir cartas ocultistas de un maestro Tibetano. Sus conferencias y escritos dieron origen al movimiento de la Nueva Era. Ella llamó a la Nueva Era la Era de Acuario y la Era de Maitreya.

En Iniciación Humana y Solar (1922), Cartas sobre Meditación Ocultista (1922), Tratado sobre Fuego Cósmico (1925) y Tratado sobre Magia Blanca (1934), Bailey escribió profusamente sobre Fuerza de Shambala. Con reminiscencias de Roerich, ella tomó Shambala como el asiento del Fuego Cósmico, que es una fuerza de purificación. Así­, ella hablaba del Fuego Cósmico como una fuente de poder destructivo para expulsar las formas degeneradas de enseñanza y establecer una Nueva Era pura.

La Fuerza de Shambala, explicaba Bailey, es la energía sumamente volátil de la voluntad. En sí­ misma, es extremadamente destructiva, y puede ser el origen del Mal. Cuando es vista como la Voluntad Divina, sin embargo, los Iniciados pueden aprovecharla para el Bien Último. Una Jerarquía en Shambala, dirigida por Maitreya, protege la Fuerza y, en el momento adecuado, impartirá los Misterios de las Era, el Plan. Uno se pregunta si sus ideas inspiraron la visión de La Guerra de las Galaxias de la Fuerza, como un poder que puede ser utilizado para el bien o para el mal, y que es protegido por una hermandad de guerreros Jedi.

shambala-9.jpgLas enseñanzas de Bailey engendraron varios movimientos ocultistas que asociaron Shambala con ideas incluso más esotéricas. Un ejemplo es la Hermandad del Templo Blanco, fundada en 1930 por el espiritualista americano Morris Doreal (1902-1963). En Maitreya, Señor del Mundo, Doreal escribió que Shambala es el Gran Templo Blanco del Tibet, situado 75 millas bajo los Montes Himalaya.

Para el budismo tibetano actual Shambala sería sinónimo del camino del guerrero, entendiendo por guerrero alguien valiente y entendiendo por valiente alguien que se conoce a sí­ mismo y trata de expresar armónicamente su cuerpo y su mente. Estará relacionada con la tradición del samurái japonés, de los indios norteamericanos, con el camino con corazón y el hombre de conocimiento de Castaneda y también con el grial y el Rey Arturo, Ésta Última tradición europea coincidiendo incluso en el posible regreso de un rey justo y sabio. Entonces, podemos considerar la historia y profecía de Shambala como una alegoría relacionada con el curso de toda la vida del ser humano.

Estas enseñanzas de iniciación de Buda en la India, simbolizan el nacimiento de una criatura envuelta de aire fresco, una nueva visión de la realidad. La pérdida de la verdadera religión en el mundo exterior, representa la perdida de la espontaneidad y receptividad propias de la infancia y que se van perdiendo en la medida en que la sociedad anima a ignorar esta naturaleza interior. De la misma manera que muchas doctrinas bárbaras se apoderan a veces del mundo, los valores ajenos también se apoderan de nuestra mente, llenándola con deseos conflictivos e ilusiones, llegando al extremo de entablarse una lucha consigo mismo.

La mayoría de la gente, no va más allá de esta etapa; permanecen cautivos en los conflictos de la conciencia superficial, imposibilitando el conseguir lo que quieren o ver lo que realmente es. Y los que logran el triunfo mundano, que todos reconocen, alcanzan el nivel del Rey que une a todos los bárbaros bajo la dictadura de su gobierno. La batalla final y la edad de oro representan la satisfacción plena de la vida, el logro de la verdadera madurez

  • 96 PRINCIPADOS,con millones de ciudades Se refiere a nuestra red interna de nadi
  • HABITANTES La energía (viento) en los nádis
  • ANILLO EXTERIOR DE MONTAÑAS NEVADAS La piel
  • ANILLO INTERIOR DE MONTAÑAS NEVADAS Se refiere al canal central
  • DOS LAGOS Los canales laterales
  • RIQUEZA de todos los habitantes Se refiere a los tesoros de la mente
  • SHAMBHALA INTERIOR Se identifica con el chacra del corazón.La mente más profunda (y sutil) reside aquí
  • FORMA DE 8 PÉTALOS Son las regiones del Shambhala que se forman con los 8 nádis que salen del centro del corazón, y cada una de ellas representa a un tipo de conciencia a través de la cual experimentamos el mundo. Son los 5 sentidos, la conciencia, el ego o YO, los pensamientos y el archivo de impresiones del pasado. Los textos describen el Shambhala con la forma de un loto de 8 pétalos a fin de que los yoguis puedan visualizarlo en sus corazones como un mándala. [Dardo Rinpoché]
  • LUZ BRILLANTE DESDE EL PALACIO, convirtiendo la noche en día Se refiere a la brillante y clara conciencia que erradica de la oscuridad, la ignorancia y la ilusión
  • LUCES CELESTES en el palacio del Rey, provisto de lentes para poder ver la vida de las lejanas estrellas y planetas Significa con ello la amplitud de percepción que proporciona la luz del conocimiento
  • LA PANTALLA MÁGICA del Rey que permite observarlo todo desde más cerca Se refiere a los clarividentes poderes de la mente más profunda
  • EL TRONO DE ORO del Rey con 8 leones La firmeza y precisión de la mente interior
  • LA GEMA DE LAS ILUSIONES El poder de la mente profunda para liberarse a si misma
  • VARAS MÁGICAS Los “Poseedores del Poder de la Mente” junto con los 96 reyes inferiores tienen esta vara (la cual les permite mandarse entre ellos los mensajes que deseen y en el momento que lo precisen – teléfonos móviles-) refiriéndose a la eficiente comunicación y control que los niveles más profundos de la mente pueden tener sobre el cuerpo y la conciencia
  • LAGOS Simbolizan los frutos de la práctica espiritual; el lago Padma Karpo (Loto Blanco), implica el reflejo de pura conciencia en la mente profunda
  • PARQUE-MALAYA Â La fría y refrescante conciencia de la realidad, extinguéndose el doloroso fuego de los deseos y la ilusión
  • PAZ Y ARMONíA El pueblo de Shambhala estando ya libre de conflictos y tumultos interiores
  • LEYES SUAVES Y SIN CASTIGOS DUROS Â Refiriéndose a que quien alcanza este estadio, esta alejado de la necesidad de una dura disciplina
  • DEMONIOS SUBYUGADOS Los habitantes han subyugado a los demonios y han hecho de ellos sus sirvientes. Se refiere con ello a la tarea de domesticar los impulsos salvajes y utilizarlos para alcanzar la última meta
  • NO PERDER LA VIRTUD Cuando los habitantes disfrutan de la riqueza y confort y se refiere a mantenerse distante de las ataduras que nos mantienen alejados de la iluminación
  • GRAN DISTANCIA(de Shambhala) El misterioso gran alcance de la mente

BIBLIOGRAFIA

-David Wallenchinsky e Irving Vallace/ Editado por Mistery Planet y The People’s Almanac

-www.espinoso.org

-Vibracionvioleta.multiply.com

-angelesymaestros.blogspot.com

-otras en la web

fuente//www.yosoyluz.cl

jueves, 3 de octubre de 2013

El último secreto de Shamballa: misterios y profecías acerca de un lugar místico.

Las expediciones a Asia central realizadas por Nicolás Roerich y su familia permitieron a Occidente descubrir un mundo desconocido. Sin embargo, varios intereses conspiraron para ocultar cuanto averiguó acerca de Shamballa hasta que fuera el momento oportuno. 

Parece que ese momento se está acercando a pasos agigantados coincidiendo con el 75º aniversario de la firma del pacto internacional que lleva el nombre del viajero y pintor ruso.


“En el país del Norte, en sus mesetas (…), viven seres de gran sabiduría. A este país no puede llegar la gente común, ni sus mahatmas pueden bajar hoy desde las alturas. En su lugar, envían mensajeros para amonestar a los líderes de las naciones”. El comentario, procedente del Kanjur o Los anales azules tibetanos, fue tomado por Occidente como un cuento de hadas. Sin embargo, aquellas palabras bastaron para espolear a Nicolás Roerich (MÁS ALLÁ, 15) (1874-1948) en la búsqueda del mito asiático por excelencia: Shamballa (MÁS ALLÁ, 17). Arqueólogo, diplomático y artista polifacético, nació entre la élite aristocrática rusa, lo que le facilitó estudiar arte e historia orientales. 

La elección no fue casual, dado que desde su infancia mostraba una afinidad especial por el continente asiático. Una leyenda en concreto le llenaba de fascinación, el mito de Bielovodye o la Tierra de las Aguas Blancas, un lugar donde el tiempo no transcurría y sus moradores vivían en una virtual juventud eterna que constituía su misterio favorito. La temática se repetía en China, bajo el nombre de Kun Lun, y lo mismo sucedía en el Tíbet con el apelativo de Kalapa, que significa “el reino oculto”.


Al comprobar que la historia se repetía por doquier, el interés de Roerich creció hasta convertirse en un vivo deseo de averiguar qué había de cierto tras las leyendas. Por desgracia, la I Guerra Mundial y la Revolución Rusa retrasaron sus planes. El éxito de sus exposiciones de arte le permitió, no obstante, reunir los fondos suficientes para organizar una expedición en 1923. Oficialmente, los motivos del viaje consistían en el estudio de la flora y la fauna de la zona, siguiendo el consejo del cuerpo diplomático estadounidense. La bandera de este país –le recomendaron– le serviría como enseña de protección. Su esposa Helena (MÁS ALLÁ, 221) y su hijo Yuri, experto en lenguas orientales, se unieron a la expedición efectuando funciones logísticas. Durante cuatro años los exploradores recorrieron cerca de 25.000 km entre Tíbet y Mongolia, partiendo de Bombay, para recalar en Darjeeling (MÁS ALLÁ, 203), situada en el norte de la India. 

El propio Roerich pintó 500 lienzos y recogió numerosas muestras vegetales, fósiles y restos artísticos. La gran mayoría se perdió gracias a los esfuerzos del espionaje británico y las triquiñuelas del Gobierno chino. De cara a la galería, el artista se retiró al valle de Kulu, cercano al Himalaya, donde fundó el Instituto Urusvati (“lucero del alba”, en sánscrito). En este centro de estudio se dedicó a llevar a cabo investigaciones relacionadas con la botánica, a traducir textos milenarios y a la arqueología. También puso en orden sus diarios y los editó hasta que le sorprendió la muerte.

Consignas veladas

La versión completa de sus viajes no se publicó hasta 1996, y se hizo solamente en ruso, al margen de los escritos ya existentes. Para ser honestos, hay que decir que los textos resultan confusos para quienes desconozcan los rudimentos del misticismo oriental debido sobre todo a las vagas referencias que incorporan. Las tradiciones y las creencias autóctonas inundan cada capítulo casi en exclusiva. 

También anotó algunas curiosidades como, por ejemplo, el descubrimiento de la supuesta tumba de Jesús en Srinagar (Cachemira, India). No muy lejos, en la ciudad de Kashgar se topó con la presunta lápida de María, que había huido hasta allí a fin de evitar la persecución que sufría. Los guías locales le dijeron que en ambos casos habían estado durante muchos años estudiando las enseñanzas de los grandes maestros. De vez en cuando Nicolás Roerich registraba información sobre ciertos sucesos anómalos: “Estamos presenciando un cuerpo voluminoso, esférico y más brillante que el Sol –relataba Roerich–, que vemos con claridad bajo el cielo azul moviéndose con rapidez”.

Descripciones como esta se repetían con frecuencia conforme se iban adentrando en ciertos lugares, como Shamballa. Cualquier referencia directa a este lugar se omite, empero, en las obras de Roerich hasta su último diario, que se publicó pocos meses antes de que falleciera. En sus páginas transcribía una entrevista con un lama sin identificar, quien le instaba a guardar silencio de cuanto viese: “Solo la curiosidad os lleva a preguntar por algo que pronunciáis sin ningún respeto; esperad y trabajad con diligencia hasta que os llegue el mensaje. Entonces vuestra curiosidad se transformará en aprendizaje”, advirtió. Llegados a este punto, cabe preguntarse quién era el misterioso interlocutor. 

El mismísimo Roerich daba a entender que era el IX Panchen Lama (segundo líder espiritual del budismo tibetano, tras el Dalai Lama), quien escapó del Tíbet en 1923 por razones políticas, aunque las pistas que brinda son demasiado endebles. Otra versión lo identifica con el abad del monasterio de Tashi Lumpo, famoso por sus enseñanzas esotéricas. 

Y una tercera incluso le señala como un delegado de Shamballa. De nuevo hay que releer el último diario para conceder un mínimo de credibilidad a la última versión. Efectivamente, en las llanuras chinas un joven jinete suntuosamente ataviado abordó a la expedición y solicitó reunirse con Roerich a fin de advertirle contra un peligro inminente. Los dos departieron durante horas en la intimidad de una tienda, tras lo cual el visitante desapareció. El suceso fue confirmado a posteriori por Helena Roerich en varias entrevistas y, más tarde, por su hijo Yuri, quien lo citó en una obra biográfica. Por supuesto, Nicolás Roerich se tomó la molestia de describir al personaje físicamente: rasgos euroasiáticos indefinidos y seis dedos en cada mano.

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