Escáneres cerebrales revelan que presentan mayor actividad en áreas vinculadas a la empatía, la conciencia y el procesamiento de la información sensorial
Se calcula que un 20% de la población es altamente sensible: capaz de sentir mayor empatía y de tener mayor conciencia a estímulos sutiles. Un estudio ha analizado los cerebros de este tipo de personas y ha descubierto que presentan una actividad mayor que los cerebros de otros individuos en regiones muy concretas, como el sistema de neuronas espejo o áreas vinculadas a la conciencia y el procesamiento de la información sensorial.
¿Suele llorar viendo las películas de sus hijos? ¿Tiende a compartir
rápidamente en las Redes Sociales cualquier foto que le conmueva? Si es
así, quizá se encuentre dentro del 20% de la población genéticamente
predispuesta a la empatía, esa capacidad cognitiva que nos permite percibir lo que otro individuo siente, o más sensible de lo habitual.
Se calcula que ese es el porcentaje de personas que, en el mundo,
son “altamente sensibles”. Como tales, se consideran a aquellos
individuos que tienden a mostrar mayor conciencia ante los estímulos
sutiles, que son capaces de procesar más a fondo la información o que
son más reactivos a los estímulos, sean estos positivos o negativos. Los
investigadores llaman a estas personas “HSP” (de highly sensitive people).
Los individuos que no son tan sensibles se diferencian de estas
personas en que prestan menos atención a los estímulos sutiles y no son
tan reactivos emocionalmente.
Buscando una causa cerebral
Científicos de la Universidad Stony Brook, de la Universidad de
California, del Albert Einstein College of Medicine, y de la Universidad
Monmouth (EEUU) han analizado los cerebros de personas HSP y los han
comparado con los de personas menos sensitivas y sensibles.
El análisis se hizo son la técnica de fMRI
(de Imagen por resonancia magnética funcional), un procedimiento
clínico y de investigación que permite mostrar en imágenes las regiones
cerebrales que ejecutan una tarea determinada.
Según explican los propios investigadores en un comunicado de la Universidad Stony Brook, estudios previos ya habían sugerido que la sensibilidad para el procesamiento sensorial
es una característica innata que se encuentra en aproximadamente una
quinta parte de la población mundial (igualmente en hombres y en
mujeres) pero que, de un tiempo a esta parte, se ha ido demostrando cada
vez más la relación entre esta sensibilidad mayor con genes, reacciones
fisiológicas y patrones de activación cerebral.
En este estudio lo que se hizo fue comparar los cerebros de
individuos de este tipo con los individuos con un nivel más bajo de
procesamiento sensitivo y sensorial. Los científicos señalan que este
es el primer análisis que demuestra como los cerebros del primer tipo de
personas procesa las emociones.
En el estudio participaron 18 individuos casados, cuyos cerebros
fueron escaneados mientras estos veían fotos de caras sonrientes o
tristes. Algunas fotos mostraban rostros de desconocidos, mientras otras
mostraban las caras de sus esposos o esposas.
Cerebros más reactivos
"Encontramos que las áreas del cerebro involucradas en la conciencia y en la emoción, particularmente aquellas relacionadas con los sentimientos de empatía, en las personas HPS presentaban un flujo de sangre sustancialmente mayor, en comparación con lo observado en los individuos de menor sensibilidad, durante el período de doce segundos en el que todos ellos veían las fotos ", explica Arthur Aron, uno de los autores del trabajo.
"Esta es una evidencia física de que las personas altamente sensibles responden de forma especialmente potente a las situaciones sociales que desencadenan las emociones, en este caso, al hecho de ver caras felices o tristes", asegura Aron.
La actividad cerebral fue aún mayor cuando las personas HPS veían las expresiones de sus cónyuges. La activación más alta ocurrió al ver las imágenes de su pareja feliz. La mayoría de los participantes fueron escaneados de nuevo un año más tarde, y se produjeron los mismos resultados.
Las áreas del cerebro que indicaron la mayor actividad – según mostró el flujo sanguíneo – fueron las conocidas como "sistema de neuronas espejo" -área fuertemente asociada con la respuesta empática-; así como regiones vinculadas a la conciencia, el procesamiento de la información sensorial y a la planificación de acciones.
Aron cree que estos resultados proporcionan una prueba más de que las personas más sensibles generalmente sintonizan mucho con su entorno, así como evidencias de que en especial altos niveles de conciencia y de capacidad de respuesta emocional son características fundamentales de las personas HPS.
"Encontramos que las áreas del cerebro involucradas en la conciencia y en la emoción, particularmente aquellas relacionadas con los sentimientos de empatía, en las personas HPS presentaban un flujo de sangre sustancialmente mayor, en comparación con lo observado en los individuos de menor sensibilidad, durante el período de doce segundos en el que todos ellos veían las fotos ", explica Arthur Aron, uno de los autores del trabajo.
"Esta es una evidencia física de que las personas altamente sensibles responden de forma especialmente potente a las situaciones sociales que desencadenan las emociones, en este caso, al hecho de ver caras felices o tristes", asegura Aron.
La actividad cerebral fue aún mayor cuando las personas HPS veían las expresiones de sus cónyuges. La activación más alta ocurrió al ver las imágenes de su pareja feliz. La mayoría de los participantes fueron escaneados de nuevo un año más tarde, y se produjeron los mismos resultados.
Las áreas del cerebro que indicaron la mayor actividad – según mostró el flujo sanguíneo – fueron las conocidas como "sistema de neuronas espejo" -área fuertemente asociada con la respuesta empática-; así como regiones vinculadas a la conciencia, el procesamiento de la información sensorial y a la planificación de acciones.
Aron cree que estos resultados proporcionan una prueba más de que las personas más sensibles generalmente sintonizan mucho con su entorno, así como evidencias de que en especial altos niveles de conciencia y de capacidad de respuesta emocional son características fundamentales de las personas HPS.
Referencia bibliográfica:
Bianca P. Acevedo, Elaine N. Aron, Arthur Aron, Matthew-Donald Sangster, Nancy Collins, Lucy L. Brown. The highly sensitive brain: an fMRI study of sensory processing sensitivity and response to others' emotions. Brain and Behavior (2014). DOI: 10.1002/brb3.242.
Bianca P. Acevedo, Elaine N. Aron, Arthur Aron, Matthew-Donald Sangster, Nancy Collins, Lucy L. Brown. The highly sensitive brain: an fMRI study of sensory processing sensitivity and response to others' emotions. Brain and Behavior (2014). DOI: 10.1002/brb3.242.
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