jueves, 11 de junio de 2015

La constelación de Orión y sus Secretos

La constelación de Orión ha estado muy presente en diversas culturas a lo largo de la historia de la humanidad. En la actualidad, la ciencia ha descubierto algo sorprendente acerca de este lugar del Universo, que coincide con las creencias de nuestros antepasados.

Orión ("El Cazador") es una de las constelaciones más destacadas en el firmamento. Sus estrellas son muy brillantes y visibles desde ambos lados del hemisferio en invierno. Su rasgo más distintivo es una agrupación de tres estrellas en el centro de la constelación, conocidas como el Cinturón de Orión, Las Tres Marías o Los Tres Reyes Magos. Orión es reconocida universalmente, no sólo ahora sino a lo largo de la historia de la humanidad: en diversas civilizaciones podemos ver cómo esta agrupación de estrellas fue objeto de admiración, devoción e incluso inspiración en la construcción de complejos arquitectónicos. 

Repasemos algunos ejemplos:

SUMERIA Y ORIÓN

Es la primera civilización humana de la que tenemos constancia. Se constituyó entre los años 4.500 y 4.000 antes de Cristo en la región de Mesopotamia, entre los río Tigris y Éufrates, donde hoy se sitúa Iraq.


Construyeron ciudades con palacios y acueductos, crearon una escritura y un sistema de numeración, un código de leyes, un sistema religioso, la fundición de cobre y estaño para producir bronce, etc. A ellos se atribuye el conocimiento astronómico más sofisticado de la antigüedad. Agruparon las estrellas en las constelaciones que hoy reconocemos, les dieron los nombres que aún usamos y las localizaron en el firmamento.




Registraron el movimiento de avance diario del sol en su aparición por el horizonte y detectaron que hay un momento en el año en q sale 2 días en el mismo sitio. En esos dos días el día y la noche tienen la misma duración y lo convirtieron en un punto de referencia al que llamaron equinoccio. Con ese punto de referencia empezaron a contar el transcurrir del tiempo de la tierra. Inventaron todos los conceptos de astronomía esférica, los polos, los ejes de rotación, la eclíptica, los solsticios y lo más increíble es que conocían el ciclo llamado precesión de los equinoccios. Éste consiste en el cambio gradual en la orientación del eje rotativo de la Tierra, siguiendo una trayectoria circular alrededor del polo, similar al bamboleo de una peonza. Este ciclo se completa cada 25.776 años.


También descubrieron que nuestro sistema solar gira alrededor de Alción, que es el sol central de las Pléyades, tardando 25.920 años en terminar cada vuelta. De esta manera los sumerios agregaron al tiempo terrestre el tiempo celeste, una enorme medida que determina ciclos que han sido precursores de significantes cambios. Dividieron el círculo de ese recorrido en 12 cuadrantes, representado cada uno por un animal, en lo que todavía hoy conocemos como zodiaco. Cada cuadrante o era dura 2.160 años y ahora estamos entrando en la era de Acuario.


Arte sumerio, representación de Nibiru, Realograma
Representación sumeria en la que figura nuestro sistema solar con
un planeta añadido, tal vez Nibiru...

Además dejaron registrada la existencia de todos los planteas de nuestro sistema solar, incluso Urano, Neptuno y Plutón, que sólo fueron redescubiertos recientemente por la astonomía moderna.


Mucha de la información que tenemos acerca de los sumerios ha llegado a nosotros a través de tablillas de arcilla con textos y representaciones acerca de su vida y creencias. Quizás la figura más representativa en su estudio fue el recientemente fallecido Zecharia Sitchin, un conocido arqueólogo e historiador que, después de traducir miles de tablillas sumerias, llegó a contundentes conclusiones que explica en los numerosos libros que tiene publicados. Según sus estudios, los sumerios hablaban de la existencia de un planeta más en nuestro sistema solar, denominado Nibiru o Planeta X, cuya órbita alrededor del sol trazaría una elipse muy marcada y que tardaría 3.600 años terrestres en completar. En este planeta habitaban unos seres inteligentes llamados Anunnaki, que provenían originalmente de la Constelación de Orión, y que crearon la raza humana en la tierra a partir de la manipulación genética de homínidos. Además, fueron ellos quienes transmitieron al hombre todo el conocimiento relacionado con tecnología, arquitectura, agricultura, medicina, etc.




Esta teoría supuso todo un desafío para la comunidad científica y de historiadores tradicionales, que optaron por interpretar los mensajes de estas tablillas sumerias como pura mitología o creencias religiosas. En cualquier caso, fueran mito o realidad, es interesante que los Anunnaki provinieran de Orión, porque esto nos da un apunte de que la civilización sumeria relacionaba el origen de la humanidad con esta constelación.


Escritura cuneiforme Sumeria, Realograma
Fragmento de piedra tallada con escritura sumeria en el 2450 A.C. Museo Louvre, París. 
Imagen cedida por Eric Gaba.

EL ANTIGUO EGIPTO Y ORIÓN

La civilización egipcia nos dejó un legado extenso de edificios, artefactos, representaciones artísticas y jeroglíficos que nos permiten conocer en detalle muchos aspectos de su cultura. Aunque también es cierto que aún existen numerosos enigmas que dan lugar a diversidad de hipótesis y dividen las opiniones de los expertos. Uno de esos misterios sin resolver se encuentra en un colosal conjunto arquitectónico que parece hacer una clara alusión a la constelación de Orión: Las Pirámides de Gizeh.




Pirámide de Keops, Realograma
Sección de la Pirámide de Keops con indicaciones de los
canales que comunican con el exterior.

En los años 90, el ingeniero Robert Bauval y el investigador Adrian Gilbert se embarcaron conjuntamente en una exhaustiva investigación acerca del asentamiento de Gizeh y formularon sus conclusiones en lo que llamaron la Teoría de la Correlación de Orión, que detallan en su libro "The Orion Mystery, Unlocking the Secrets of the Pyramids". En él explican que las tres pirámides de Gizeh (KeopsKefrén y Micerino) están situadas de tal manera que son una representación a escala de las tres estrellas que conforman el Cinturón de Orión, tal y como estaban situadas en el año 10.500 a. C. Además, descubrieron que en la pirámide de Keops hay unos angostos canales que comunican la Cámara del Rey y de la Reina con el exterior, orientados de manera que cuando el primero trazaba una trayectoria hacia el centro de la constelación de Orión, el segundo la trazaba hacia la estrella Sirio.


Curiosamente, dos de los dioses principales de los egipcios eran Osiris y su mujer Isis, a los que asociaban con Orión y la estrella Sirio respectivamente, y eran considerados los creadores de La Tierra y de la humanidad. Una vez más, nos encontramos ante una civilización que asociaba a Orión con el origen del hombre.

Cinturón de Orión y Pirámides de Gizeh, Realograma
Al superponer el mapa estelar del Cinturón de Orión sobre la posición de las Pirámides
de Gizeh, vemos que el patrón coincide.

TEOTIHUACÁN Y ORIÓN





Teotihuacán fue una de las mayores ciudades prehispánicas que conocemos en Mesoamérica. Los restos de este asentamiento se encuentran a unos 45 km al noroeste del centro de la Ciudad de México. La fecha de su construcción y la identidad de sus primeros pobladores son una incógnita. Se especula que los habitantes iniciales pudieron ser los totonacos, los nahuas o los pueblos de habla otomanqueana, aunque hipótesis más recientes se inclinan a pensar que la ciudad de Teotihuacán fue un centro cosmopolita en la que convivieron grupos de diverso origen étnico.




Los monumentos más destacados en el lugar son la Pirámide del Solla Pirámide de la Luna y el Templo de Quetzalcóatl. El astrónomo británico Gerald S. Hawkins explica en su libro "Más allá de Stonehenge", cómo la construcción de Teotihuacán está estrechamente ligada a algunas constelaciones. Mediante un programa informático descubrió que algunos de los edificios están orientados hacia la estrella Sirio (la misma que en el antiguo Egipto se identificaba con la diosa Isis, esposa de Osiris). Posteriormente, Adrian Gilbert investigó la posible relación entre las pirámides de la Luna y el Sol y el Templo de Quetzalcóatl con las tres estrellas del cinturón de Orión, observando que existe una correlación, al igual que ocurre con las Pirámides de Gizeh en Egipto.

Cinturón de Orión y Teotihuacán, Realograma
Aquí vemos cómo la posición de las estrellas del cinturón de Orión también coincide
con la de las pirámides principales de Teotihuacán.
Cinturón de Orión y Pirámides de China, Realograma
Mapa estelar del cinturón de Orión superpuesto a una fotografía
aérea de las pirámides de Xian, China.

ORIÓN EN LA CHINA ANCESTRAL




En la antigua China también se construyeron pirámides, que a día de hoy están cubiertas de vegetación, y a primera vista pueden parecer meros montículos en el paisaje. Cerca deXi'an, capital de la provincia de Shaanxi, hay un conjunto de pirámides que están agrupadas siguiendo el mismo patrón que el conjunto de Gizeh en Egipto y el asentamiento de Teotihuacán en México, ¿nos encontramos de nuevo ante una"Correlación de Orión"?


OTRAS CULTURAS QUE RENDÍAN CULTO A ORIÓN

En otras sociedades, como la Grecia Clásica y el Imperio Romano, encontramos referencias mitológicas y literarias a Orión. Por otro lado, en el más antiguo de los escritos sagrados del Hinduismo (Rg Veda) se cuenta la historia del dios Prajapati, que representa a la constelación de Orión, y es considerado uno de los dioses creadores.


LA CONSTELACIÓN DE ORIÓN DESDE LA CIENCIA ACTUAL

En estos últimos años, y gracias a los telescopios modernos, la astronomía la llegado a una serie de descubrimientos acerca de la fisionomía de la constelación de Orión. Uno de los más sorprendentes es que está cubierta por una gigantesca estructura de hidrógeno, plasma y estrellas nacientes: el Complejo de Nubes Moleculares de Orión, también conocido como M42. Este fenómeno, que se encuentra a 1500 años luz de nuestro planeta, destaca especialmente por ser una región intensa de formación estelar y hay indicativos de que nuestro sistema solar pudo tener su origen allí.



Nebulosa M42 en Orión, Realograma
Nebulosa que cubre Orión, conocida como M42.

El científico de la ESO (European Southern Observatory) Thomas Stanke, que ha dedicado estos últimos años al estudio de la M42, afirma que muchas de estas estrellas que están naciendo en Orión, evolucionarán como nuestro Sol y que algunas de ellas tendrán planetas parecidos al nuestro orbitando a su alrededor.



Es interesante contrastar este dato con la divinización de Orión por parte de aquellas primeras civilizaciones, que ya en aquellos tiempos consideraban Orión como el origen de su existencia y el lugar donde habitaban sus creadores. Nos encontramos ante uno de esos pliegues donde ciencia y creencias se solapan.

fuente/laeradeaquario.blogspot.com.es

¿Un TR3B en la Luna?

Mutaciones genéticas en Humanos.

mutacion

En el siguiente audio, hablamos sobre estudios que demuestran que el medio nos esa haciendo cada vez más “tontos”, de cómo china está mejorando la raza d e sus ciudadanos, de la evolución humana y las distintas mutaciones que deberían existir y que no aparecen por ningún sitio, sobre personas que han obrado prodigios inexplicables por la ciencia y muchas más interesantes cuestiones que esperamos que os gusten.


El programa corresponde a una emisión de la Cadena Pirenaica (Andorra) y más concretamente, el programa Sabiens presentado y dirigido por Ferran Prat, en el intervienen Jose Luis (JL) de Mundo Desconocido y Artur Homs. 



miércoles, 10 de junio de 2015

Conexión Ancestral: Las estatuas y símbolos presentes en todas partes del mundo.

Antiguos monumentos esparcidos en varios lugares del mundo presentan un enigma sin resolver: ¿Por qué tantas estatuas en sitios prehistóricos —desde el antiquísimo Göbekli Tepe en Turquía hasta la Isla de Pascua en Chile— comparten posturas similares? La firma y simbología mostrada en estas figuras apuntan a una conexión lo suficientemente fuerte como para que diferentes culturas inmortalicen la misma temática a pesar de estar separadas por miles de kilómetros y años.

Izquierda: Gobekli Tepe (c. 9600 a.C.). Derecha: Primera estatua humanoide, Urfa (12000 a.C.).
Izquierda: Gobekli Tepe (c. 9600 a.C.). Derecha: Primera estatua humanoide, Urfa (12000 a.C.).
Göbekli Tepe es el lugar de culto religioso más antiguo del mundo. Se levanta en el punto más alto de una extensa cadena montañosa situada a unos 15 km al nordeste de la ciudad de Sanliurfa (antigua Urfa/Edessa), en el sudeste de Turquía, cerca de la frontera con Siria. El lugar, según los arqueólogos, fue erigido hacia el X milenio a.C. (ca. 11.500 años atrás), antes de que comenzara la sedentarización. Misteriosamente, todo este complejo de piedras, pilares y esculturas fue deliberadamente enterrado sobre el 8000 a.C., permaneciendo abandonado por espacio de 500 años. Si uno presta atención a los detalles de los pilares y estelas en forma de T de hasta 60 toneladas que componen el santuario, se pueden distinguir, entre relieves de animales y otros símbolos, figuras humanoides —supuestos dioses neolíticos— con brazos trazados a ambos lados y cuyas manos se juntan hacia la parte frontal, apuntando hacia lo que sería el ombligo. Esta posición tendría un significado sagrado o especial.


Göbekli Tepe.

Sin embargo, a pesar que Göbekli Tepe es el primero, definitivamente no es el único en poseer estatuas de este estilo. Por ejemplo, la diosa sumeria Inanna también era caracterizada en la misma posición. De igual forma, las famosas estatuas de la Isla de Pascua, conocidas por el nombre de moai, fueron construidas de pie y con las manos sobre el ónfalo. De acuerdo a los investigadores, esta postura simboliza el nacimiento o el renacimiento. Lo cual tiene mucho sentido considerando que, según el idioma autóctono, la isla antes era conocida como Te pito o te henua, que significa «El ombligo de la Tierra».


Vista frontal de un moai de la Isla de Pascua. Nótese la posición de sus manos respecto al ombligo.
Vista frontal de un moai de la Isla de Pascua. Nótese la posición de sus manos respecto al ombligo.
La comparación entre las piedras de Göbekli Tepe y la Isla de Pascua, así como de otros lugares antiguos similares, se vuelve inevitable. Numerosas versiones de este tipo de estatuas —de pie y con sus manos hacia el ombligo— pueden ser encontrados en lugares del mundo tan dispares como Bolivia (Tiwanaku), Azerbaiyán (Gobustán), Tahiti, las Islas Marquesas, Colombia (San Agustín), Egipto, y Costa Rica. Esto indica que la creencia sobre el «renacimiento» se diseminó a lo largo y ancho de todos los continentes; y es posible que las comunidades y diferentes culturas hayan experimentado algo lo suficientemente traumático o trascendente como para desarrollar arquetipos en común a pesar de las distancias. En la psicología junguiana, la cual propone que en el mundo primitivo todos los hombres poseían una especie de alma colectiva, el arquetipo es el patrón ejemplar del cual otros objetos, ideas o conceptos se derivan de manera inconsciente.

Paralelismos evidentes en diferentes estatuas antiguas de varias partes del mundo.


En el caso que nos ocupa, los cultos a la fertilidad, la muerte y la vida después de ésta, surgieron en tierras remotas aproximadamente en el mismo periodo. Pero, ¿cómo es esto posible? ¿Qué llevó a los antiguos a construir estatuas similares a pesar de, supuestamente, no conocerse o cruzarse entre sí? ¿Qué relación se puede establecer entre Anatolia (Asia Menor, Turquía) y la Isla de Pascua localizada en mero Océano Pacífico? A pesar de no ser una característica que se destaca, las posiciones de los brazos y manos existen en los torsos de las estatuas de la Isla de Pascua. Los moais alcanzan una altura de 4.5 metros, al igual que las figuras antropomorfas de Göbekli Tepe. En 2010, los arqueólogos excavaron bajo uno de los moais, revelando extremidades reposando sobre el torso en la mencionada posición del «nacimiento» o «renacimiento».

Estatuas en un monumento sepulcral del culto indígena de San Agustín en Colombia.
Estatuas en un monumento sepulcral del culto indígena de San Agustín en Colombia.
Otra cuestión intrigante es el gran tamaño de las estatuas en comparación con un humano promedio. Es posible que en el pasado nuestra especie se haya sentido inferior ante la naturaleza y el universo, por lo que la megalomanía de sus obras compensaba tal complejo. Otra alternativa es que, debido a grandes cataclismos naturales, los hombres de antaño creyeran que debían erigir grandes estatuas con el objetivo de ser notados por los dioses y, a la vez, rendirles tributo de esta forma con la esperanza de obtener algo de misericordia. Y es esta última alternativa la que mejor podría explicar el culto al «renacimiento». Como ya mencionamos al principio, Göbekli Tepe fue erigido hace aproximadamente 11.500 años, fecha que, oh casualidad, coincide con el colapso drástico del último periodo glacial. Análisis científicos sobre esa época, en particular los del historiador de la ciencia D.S. Allan, y J. B. Delair, geólogo y antropólogo de Oxford, describen un desastre cósmico hace 11.500 años; de tal magnitud que reorganizó el sistema solar entero y, desde luego, a la Tierra misma. La teoría sugiere que el trauma resultante afectó y cambió la conciencia humana, y la gente antigua se vio obligada a adquirir nuevas habilidades. Aquellos sobrevivientes del cataclismo climático que elevó los niveles del mar durante los siglos subsecuentes, quedaron multi-traumatizados y desarrollaron una suerte de «catastrofobia».

Monolito Ponce, Tiahuanaco, Bolivia.
Monolito Ponce, Tiahuanaco, Bolivia.
¿Pudieron entonces estas estatuas ser un tributo a la voluntad e instinto de la especie humana por sobrevivir? ¿Fueron acaso civilizaciones madres desaparecidas las que difundieron el conocimiento necesario para tal supervivencia? Después de todo, según la historia (abierta) que contradice los exegetas más ortodoxos, otros monumentos «imposibles» habrían sido construidos hacia la misma época que Göbekli Tepe, con el claro objetivo de dejar un registro inmemorial en piedra de lo que sucedió en aquellos tiempos.

fuente/MysteryPlanet.com.ar

martes, 9 de junio de 2015

INSÓLITO. Ellos pensaban que esta niña era tímida y silenciosa. Pero luego sucedió esto...

NASA encuentra Marihuana en un Meteorito.

NASA encuentra Marihuana en un Meteorito

Investigadores que analizan fragmentos de meteoritos en búsqueda micro-bacterias encontraron la presencia de Tetrahydrocannabinol (THC), el componente químico y principal constituyente psicoactivo en el cannabis en un fragmento caído en Nevada en 2010.

James Hun, astrofísico especializado en astrobiología de la Universidad de Hawaii, encabezó el equipo y en declaraciones reproducidas por Notallowedto manifestó que “el descubrimiento del THC en fragmentos de meteorito tendrá un enorme impacto en la ciencia de la astrobiología. Si es que las sustancias químicas -que cambian las funciones del cerebro y resultan en alteraciones de la percepción, humor o conciencia en humanos- tienen su origen en el espacio exterior ¿Qué rol han tenido los impactos de los cometas en la especie humana? ¿O en la vida del planeta en su conjunto?”.

De acuerdo con la Wikipedia, “El tetrahidrocannabinol (THC), también conocido como delta-9-tetrahidrocannabinol (Δ9-THC), es el principal constituyente psicoactivo en cannabis. Fue aislado por primera vez en 1964 por Yechiel Gaoni y Raphael Mechoulam del Instituto Weizmann de Ciencias en Rejovot, Israel. En estado puro, es un sólido vítreo a bajas temperaturas, y se torna viscoso y pegajoso al calentarlo. El THC es poco soluble en agua, pero se disuelve fácilmente en la mayoría de disolventes orgánicos, específicamente lípidos y alcoholes”.


“El THC tiene un efecto analgésico leve o moderado, y el cannabis puede ser usado para tratar el dolor al alterar la liberación de transmisores en el ganglio espinal de la médula espinal y en la sustancia gris periacueductal. Otros efectos incluyen relajación, alteración de los sentidos visuales, auditivos, y olfativos, fatiga, y estimulación del apetito. Los fitocannabinoides, en especial el THC y el CBD, han demostrado también influenciar en la permeabilidad intestinal, reduciéndola. Tiene propiedades antieméticas, y también podría reducir la agresividad en ciertos individuos”.

James Hun

Antecedentes


El Tetrahydrocannabivarin (THCV) también fue encontrado en otro fragmente en 2009 por un equipo de investigación de la Universidad de México, pero los resultados fueron descartados entonces por “la controversia natural del descubrimiento" y porque se sospechó que los propios investigadores lo habían contaminado. De hecho fueron suspendidos, injustamente a decir de éstos, ya que juraban y perjuraban que no era así y se ofrecieron a que se les practicaran análisis toxicológicos.

Los científicos e investigadores siguen analizando las muestras para echar más luz sobre el descubrimiento.

Fuente: Notallowedto (us)

fuente/astropampa.com