miércoles, 19 de octubre de 2016

Facultades Metahumanas.

Niña rusa de 4 años asombra al mundo al hablar 7 idiomas.(ruso,inglés, chino, español, alemán, francés y árabe)




Otro caso es el del niño Ramsés, pues también tiene extraordinarias habilidades como por ejemplo es capaz de adivinar números aleatorios escritos por alguien más en secreto (como se puede apreciar en el siguiente video) y ahora es el foco de un estudio científico sobre el tema.

Facultades metahumanas. Es decir: pocas veces hemos escuchado de niños genios con la capacidad de leer la mente. La historia de Ramses Sanguino, de 5 años de edad,


LIBRO PDF: El Guarián del Génesis. La Búsqueda del legado oculto de la Humanidad.

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El hombre que sobrevivió a dos bombas nucleares.

Aunque parece un pasado ya muy lejano, no tantos años nos separan de los históricos bombardeos deHiroshima y Nagasaki producidos en la Segunda Guerra Mundial. Postales de una etapa de horror, estos ataques que hoy vemos como terribles e increíbles fueron reales, generados por el hombre. Y terminaron con la vida de miles de personas en Japón. 


De esa historia tan dolorosa para el mundo entero, no solo quedan imágenes, sino también valiosos testimonios de quienes fueron sus protagonistas y la vida les dio el regalo de poder seguir adelante. 

Tsutomu Yamaguchi fue uno de ellos y cada vez que su historia es contada causa asombro: este hombre no solo sobrevivió a un bombardeo nuclear, ¡sino a dos! 


El hombre que sobrevivió a dos bombas nucleares-  Tsutomu Yamaguchi
En el momento del ataque de Hiroshima, Tsutomu Yamaguchi tenía 29 años y había sido enviado allí por la compañía Mitsubishi, para la que trabajaba como ingeniero. Cuando se produjo el bombardeo, él ya había cumplido allí su estadía y estaba listo para partir hacia su casa y volver a ver a su esposa y su hijo recién nacido.

Así contaba él el momento en que observó un avión sobrevolar: “Lo vi en el cielo, lanzó dos paracaídas. Los observé descender y de repente fue un gran flash en el cielo y luego salté por los aires. Cuando abrí los ojos, todo estaba oscuro. Pensé que había muerto, pero la oscuridad se abrió y me di cuenta de que estaba vivo”.

Su vida se salvó porque estaba a tres kilómetros del sitio en que estalló la bomba, pero de todas maneras sus tímpanos se reventaron y sufrió quemaduras en los brazos. 
El hombre que sobrevivió a dos bombas nucleares- hiroshima
Pero, al volver a su cuidad natal (Nagasaki) luego de lo sucedido, vivió nuevamente lo mismo. Otra explosión; otra bomba. “Creí que el hongo atómico me había seguido hasta aquí”, señaló. 

La distancia, otra vez, fue la que permitió que sobreviviera, pero las heridas y secuelas de los bombardeos tardaron mucho tiempo en sanar. 

Aunque parezca imposible de creer, quienes sobrevivieron a estos ataques (a los que se llama “Hibakusha” que quiere decir “persona bombardeada”) no solo tuvieron que superar los daños físicos y mentales, sino también el temor del resto de la población que los creía posibles transmisores o fuentes de contagio de la radiactividad. 

En el caso de Tsutomu, necesitó tanto tiempo para recuperarse de lo vivido que recién cuando cumplió 80 años decidió contar su historia, publicando su autobiografía. 

El hombre que sobrevivió a dos bombas nucleares
Con 93 años, Tsutomu Yamaguchi falleció debido a un cáncer estomacal en Nagasaki, la misma ciudad que lo vio nacer y convertirse en un recordatorio viviente de lo que las guerras, enfrentamientos y ambición pueden generar en la vida de miles de personas. 

¡Trabajemos por la paz! 
FUENTES:
History
Historias De La Historia

fuente/Bioguia

martes, 18 de octubre de 2016

El revolucionario método capaz de despertar a pacientes del coma.

El revolucionario método capaz de despertar a pacientes del coma



El estado de coma se caracteriza por un cuadro de muy bajo o nulo nivel de conciencia, donde la persona conserva sus signos vitales, pero no puede moverse o responder a los estímulos del entorno.

Esto puede ser causado por la complicación de una enfermedad o bien el resultado de lesiones. Su progreso depende de la causa y la severidad del caso. De hecho, hay muchas experiencias de personas que han estado en esta condición durante varios años y han despertado, y otros que siguen así, pero la familia aun conserva la esperanza de que algún día vuelvan a abrir los ojos.

Un reciente estudio de la UCLA (Universidad de California, Los Ángeles) podría hacer de esa esperanza, una posibilidad real.

La investigación, a cargo de Martin Monti, un profesor de psicología y neurocirugía de UCLA, ha demostrado que un método hasta ahora no utilizado en estos casos ha sido capaz de despertar del coma a un hombre de 25 años. ¿Cómo fue posible? Gracias a la estimulación con ultrasonidos.

Al igual que sucede en las personas que tienen un buen estado de salud, los sonidos son capaces de ayudar a sanar al cuerpo del paciente en coma. La estimulación que producen en las neuronas del área cerebral del tálamo, en el caso de estos pacientes, podría ayudar a su recuperación, ya que éste es el eje central del procesamiento de la información cerebral.

Esta técnica de ultrasonido de baja intensidad fue iniciada por Alexander Bystritsky, profesor de UCLA de psiquiatría y ciencias bioconductuales en el Instituto Semel para la Neurociencia y Comportamiento Humano y co-autor del estudio. Se aplicó en el paciente mediante un dispositivo capaz de crear una esfera de energía acústica que puede dirigirse a diferentes regiones del cerebro a fin de estimularlas.

"Es casi como si fuéramos el arranque de las neuronas de nuevo en la función," señaló Martin Monti; y agregó: "Hasta ahora, la única manera de lograr esto era un procedimiento quirúrgico arriesgado conocido como estimulación cerebral profunda, en la que se implantan electrodos directamente en el interior del tálamo”.

A diferencia de esto, la técnica de ultrasonidos no es invasiva.

Como resultado del estudio, el paciente despertó, recuperó la conciencia y la comprensión del lenguaje por completo.

Aunque sin duda se trata de un avance esperanzador, aun los resultados requieren más estudios. Pero, de funcionar, podría incluso construirse un dispositivo portátil para ayudar a otros pacientes en coma a volver a despertar.

FUENTES:
UCLA
Redacción Médica

El vídeo más Misterioso del Mundo...

¿Existió una Humanidad que convivió con los Dinosaurios?

La Consciencia y la Energía son lo mismo.

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LA CONCIENCIA Y LA ENERGÍA SON LOS DOS ASPECTOS ESENCIALES DE LA REALIDAD MÁS PROFUNDA; ÉSTA ES UNA VISIÓN SOSTENIDA POR EL BUDISMO, EL HINDUISMO Y OTRAS TRADICIONES NO DUALES QUE CONCIBEN EL UNIVERSO DESDE UNA ONTOLOGÍA DE SÓLO LUZ.

La teoría de Einstein, con su famosa fórmula E = mc2,  sugiere que la energía y la materia no son dos cosas separadas, sino dos aspectos de lo mismo. Las cosas pueden verse como objetos sólidos y separados de los demás o también –quizá de manera más acertada– como oscilaciones de energía en el espacio o excitaciones en el vacío que están constantemente surgiendo y desapareciendo. 

Si bien esta implicación de la teoría de Einstein es aceptada por la ciencia, por otro lado, seguimos arrastrando la visión cartesiana de una diferencia irreconciliable entre mente y materia, la cual influye profundamente en nuestra concepción del mundo, y nos cuesta más trabajo ver a la mente también como materia (o a la materia como mente y no como dos cosas separadas). Por añadidura, nos cuesta concebir también a la energía como mente y a la mente como energía (pese a que nuestra experiencia nos dice que nuestros pensamientos afectan nuestro cuerpo y su capacidad de hacer algo, es decir, nuestra energía). Sin embargo, existen otras tradiciones, menos materialistas y dualistas que la ciencia moderna, que sostienen que la energía y la conciencia son dos aspectos de la realidad fundamental del universo y que, como la energía y la materia, son convertibles.

Hace unos años el físico Richard Feynman escribió: "Es importante notar que en la física actualmente no tenemos un conocimiento verdadero de lo que es la energía". Con esto se refería a que la conservación de la energía es un principio matemático abstracto, y no se tiene una noción concreta de lo que es la energía. Esto parece reflejar una de las paradojas de la ciencia, que si bien es capaz de producir modelos teóricos funcionales del universo que a veces logran traducirse en tecnología, no es igual de proficiente cuando se trata de explicar la naturaleza de una forma que incluya nuestra experiencia de la misma, ni tampoco resuelve cuestiones sobre el significado, el sentido o la esencia de las cosas –lo cual tradicionalmente es la dimensión de la metafísica–. La ciencia en este sentido reconoce sus limitantes, se dedica a describir la realidad más que a encontrarle sentido. Y, en este caso, su modelo de realidad no es suficiente, ya que, como seres humanos encarnados en el mundo, experimentamos una relación intensa y vívida con la energía, la cual buscamos entender en un nivel que haga sentido con nuestra experiencia subjetiva de la misma, es decir, con nuestra conciencia de la energía. 

Quizá la ciencia moderna no tiene un modelo satisfactorio para entender qué es la energía por la misma razón que no tiene un modelo satisfactorio sobre la conciencia, lo que se conoce como el problema duro de la ciencia, puesto que, como argumentaremos aquí, la conciencia y la energía están estrechamente unidas.

En la medicina tibetana se dice que "el rlung es el caballo en el que se sube la mente", rlung es equivalente al prana del hinduismo, al chi de la medicina china, al mana de los nativos americanos y al pneuma de los griegos; un término que se traduce como energía o aliento vital. De manera similar, en el qi-gong (o chi-kun), afianzado en la medicina tradicional china, se dice que a donde se dirige la atención, ahí le sigue el chi, y se usa el término dao-yin, lo cual hace referencia literalmente a dirigir la energía y también a una práctica ascética de utilizar la intención para dirigir la energía por los diversos canales para desbloquear puntos que se han obstaculizado, muchas veces debido a factores emocionales (notablemente en la medicina china las emociones son consideradas como vientos internos, es decir corrientes de energía, y están ligadas a ciertos órganos y elementos en un flujo de transformación interna).

Para estas tradiciones la energía no es un concepto abstracto, invisible o remoto, sino que es una realidad cotidiana que permea toda las dimensiones de la existencia. David Frawley explica el significado de prana en el hinduismo:

Prana tiene muchos niveles de significado, desde el aliento hasta la energía de la conciencia en sí misma. Prana no sólo es la fuerza vital básica, también es la forma maestra de toda la energía que trabaja al nivel de la mente, cuerpo y vida. En realidad, todo el universo es una manifestación de prana, que es el poder creativo original.

En realidad el yoga y el tantra no son más que sistemas que mapean la relación entre la conciencia y la energía y crean modelos para experimentar en el cuerpo su unidad, la cual es representada como la unión entre Shiva y Shakti. Shiva, en sistemas como el tantrismo de Cachemira, simboliza la conciencia absoluta y Shakti significa la manifestación de esa conciencia que no tiene forma. Al manifestarse esa conciencia, es el mundo; la conciencia se despliega como la energía de Shakti y el poder de la manifestación de existir como cualquier cosa. Ram Dass lo dice poéticamente: "La madre (Shakti, la diosa) es el instrumento para transformar el espíritu en materia. Entender que toda forma es espíritu vuelto materia es ver que en el origen del mundo de la materia yace la madre". En otras palabras, aquí nos está diciendo Ram Dass que la energía (Shakti) es el instrumento para que la conciencia o espíritu se haga manifiesto en la dimensión de la experiencia, para que pueda experimentarse a sí misma (a través de nosotros que somos sus extensiones). Esto es lo que significa el mantra Sat-Chit-Ananda, la manifestación del ser, que es pura conciencia, como gozo. Abhinavagupta, el más grande maestro tántrico del shivaísmo, escribe que "la conciencia está hecha de luz y gozo". Quizás esto mismo había entendido William Blake cuando escribió: "la energía es delicia eterna".

La relación entre Shiva y Shakti es poéticamente representada en el cuerpo a través del despertar de la energía kundalini. Shakti, la diosa dormida en la forma de una serpiente enrollada en la columna, despierta y se eleva por el cuerpo en un torrente de energía liberando los nudos de los nadis hasta alcanzar la corona donde duerme Shiva (quien es representado como un yogui meditando absorto en samadhi en la cima de una montaña o en la flor de loto de los mil pétalos). Cuando se realiza la unión de Shiva y Shakti (el hierosgamos de la conciencia y la energía en el microcosmos que es el cuerpo) no sólo se libera una energía alquímica que se derrama por el canal central, particularmente vertiendo gotas de ambrosía en la copa del corazón, se produce paralelamente (y este es el objetivo) un estado de conciencia en el que el individuo se fusiona con la divinidad y experimenta la totalidad del universo subjetivamente (Atman se vuelve Brahman). En cierta forma, es la energía que se libera la que funciona como el soporte de esa conciencia. Desde la perspectiva relativa del individuo, la divinización o la percepción de toda la realidad como teofanía no es posible más que a través de una cierta descarga o concentración de energía. La práctica tántrica es esencialmente una metodología que se utiliza para liberar esta energía que sostiene una percepción del mundo como el cuerpo de la deidad, donde todas las apariciones son fenómenos libres de sufrimiento que se transfiguran en gozo estético y en gnosis no dual. 

Abhinavagupta escribe en su Tantraloka

La realidad suprema (param tattvam) de lo cognoscible es Shiva, pura luz consciente (prakâsa), porque lo que no es luz consciente no puede llegar a ser luminoso ni tener existencia real.

El término sánscrito prakâsa es usado por Abhinavagupta para designar la unidad entre la conciencia y la luz. Lo que nos lleva al entendimiento más fino de este artículo: la luz como la síntesis de la energía y la conciencia. Y es que la luz para diversas tradiciones religiosas esotéricas, en Occidente y en Oriente, engloba tanto a la conciencia como a la energía; es justamente aquello que sella esta unidad entre la mente y su manifestación. Esto es interesante porque la luz, sin quererla definir científicamente, nos remite a algo que no es del todo material, pero que es lo que nos permite percibir la materia, y como si fuere, teje un puente entre el mundo físico y la experiencia del mismo (la luz es, regresando a la cita de Ram Dass, el instrumento para materializar o revelar el espíritu). Asimismo, tenemos todas estas metáforas que igualan a luz con la inteligencia o con la sabiduría, como si fuera una energía cargada de pura conciencia. La luz de manera muy intuitiva parece comunicarnos la idea de energía y de conciencia al mismo tiempo. 

En las religiones abrahamicas la luz nos remite siempre a la creación (el fiat lux), a la manifestación de la voluntad divina y a la vez al verbo, a la palabra o al pensamiento divino. El filósofo, teólogo y protocientífico Robert Grosseteste, quien es considerado un santo en Inglaterra a la vez que el padre del pensamiento moderno de ese país, creía que la naturaleza matemática del universo, sus mismas leyes, derivaban directamente de que estaba hecho de luz. Arthur Zajonc en su libro Capturar la Luz glosa la teoría de Grosseteste:

Según Grosseteste, la luz fue la primera forma de corporeidad, a la que siguieron todas las demás. Multiplicándose a partir de un sólo punto infinita e igualmente hacia todas partes, formó una esfera y de esta acción surgió la materia... Por consiguiente, toda la creación material es luz condensada.

[...] A su juicio, el "Hágase la luz", ordenado por Dios abarcaba dos vertientes. Una era la que a la postre se convertiría en la luz de nuestra existencia física, que se condensaba incluso en forma de materia; la otra era una luz de inteligencia encarnada en las creaciones puramente espirituales y angélicas de Dios.

Así tenemos esta doble vertiente de la luz, que es lo que se cristaliza como los cuerpos materiales y a la vez es el medio de la inteligencia o la forma en la que la conciencia divina se mantiene como presencia que experimenta el mundo (los ángeles pueden verse ciertamente como el sistema nervioso de la divinidad). El poeta y maestro budista estadounidense Traktung Yeshe Dorje escribe: "esta luz clara es lo más inexplicable... es percibida y a la vez es quien percibe". También Jung notó esta relación de la luz con la conciencia particularmente en sus estudios sobre la alquimia. Jung cita a Paracelso: "El hombre al nacer 'está dotado con la luz perfecta de la naturaleza'. Paracelso lo llama 'el mejor y primer tesoro que la monarquía de la naturaleza oculta dentro de sí misma"'. Y en su libro Sobre la naturaleza de la psique, escribe:

Ya que la conciencia siempre ha sido descrita en términos derivados del comportamiento de la luz, en mi perspectiva no es exagerado pensar que estas múltiples luminosidades corresponden a diminutos fenómenos conscientes. Esta luz es la "lumen naturae" que ilumina la conciencia. Si la luminosidad aparece en forma monádica como un sola estrella, sol u ojo, rápidamente asume la forma de un mandala y debe ser interpretada como el sí mismo.  

Jung aquí parece jugar con la idea de un especie de naturaleza cuántica de la conciencia cuya unidad mínima serían los fotones (pero que a la vez nos remite a los thigles del budismo tibetano, que son puntos de luz o energía vital pero que a la vez son unidades de información, como bits cuánticos). La forma en la que estas "múltiples luminosidades" se configuran como mónadas de las cuales deriva una identificación con un yo  (con un sí mismo), nos remite a ciertos aspectos cosmológicos del budismo tibetano donde se explica que la pura luz o energía de la mente que aparenta surgir de la vacuidad (sin dejar de ser igual a la vacuidad) se convierte en los cuerpos y en los objetos que aparentan estar separados de una mente que los percibe. La energía infinita de la vacuidad con su cualidad de cognoscitividad primordial no está limitada y puede, entre su infinito potencial de manifestarse, caer en un proceso de ignorancia en el que percibe el universo de forma dualista y da pie a sí a un mundo de objetos sólidos que emergen como si existieran separados de un yo que los percibe. Esto significaría que donde en realidad existe sólo pura luz dotada de conciencia primordial, nosotros empezamos a producir, a través de la percepción dualista, un universo ilusorio de objetos físicos separados de esa energía y de esa conciencia. Alan Wallace lo explica mejor en su artículo "Perspectivas científicas y budistas de la energía":

Los contemplativos budistas han sondeado más allá de este estado de la vacuidad relativa de la mente, penetrando a las dimensiones más profundas de la cognoscitividad [awareness], conocidas como conciencia primordial (jnana). Esto es el estado base no local, atemporal y último de la cognoscitividad, el cual es idéntico [no dual] al espacio absoluto de los fenómenos (dharmadhatu), del cual surge todo el cosmos del tiempo-espacio y la mente-materia. Este espacio luminoso de la conciencia primordial también está imbuido de infinita energía, de la que todas las otras formas de energía surgen, ya sea térmica, cinética, electromagnética o gravitacional. Como tal, esta dimensión de realidad trasciende todo concepto dualista de materia y energía, espacio y tiempo, sujeto y objeto, mente-materia e incluso existencia y no existencia. En la visión budista conocida como la gran perfección (dzogchen), todos los fenómenos, mentales o físicos, son vistos como manifestaciones de la unidad primordial entre la conciencia infinita, el espacio y la energía. Dudjom Lingpa, un reconocido contemplativo tibetano del siglo XIX, describe el espacio absoluto de los fenómenos así:

Debido al aspecto radiante y claro del espacio, puede aparecer como tierra, fuego, aire, agua, forma, sonido, olor, sabor, y objetos táctiles. Esto es, como la apariencia de planetas y estrellas reflejándose en el océano debido a su aspecto de claridad y limpidez. Pero todo estos reflejos, planetas y estrellas no son más que el océano mismo, y son de la misma naturaleza... Debido al poder incesante en la naturaleza de la conciencia primordial, existe un completo conocimiento de todos los fenómenos, sin que jamás se mezcle con o entre a los objetos. La conciencia primordial se origina por sí misma, es naturaleza clara, libre de oscurecimiento internos y externos; es el espacio infinito que todo lo permea, radiante y claro, libre de toda contaminación.

Aunque el budismo no concibe que exista una deidad creadora o un alma inmortal, los paralelos entre esta conciencia primordial del dzogchen que es igual al espacio y a la energía y la forma en la que describe la conciencia el tantrismo de Cachemira (cuyo máximo exponente es Abhinavagupta) son de notarse. Ambas escuelas son tal vez las dos cumbres de la filosofía no-dual y ambas practican una versión de  anuttara y anupaya, el no-método, para simplemente residir en ese estado de conciencia primordial sin elaboraciones. 

Para concluir, después de entrever esta relación entre la conciencia y la energía en un nivel metafísico y cosmológico regresemos al cuerpo, que es a fin de cuentas el vehículo que tenemos para alcanzar la realización de esta unidad entre la energía y la conciencia. En su estudio de una serie de textos secretos, atribuidos a Padmasambhava, en los que se explica el papel de la sexualidad en el vajrayana, Kenard Lipman escribe:
Estos textos nos revelan que el estado de energía depende del nivel de desarrollo de un individuo. Inicialmente la energía es algo que le pertenece al cuerpo que "tenemos". Pero cuando uno va progresando más allá de esta visión posesiva del cuerpo, uno se da cuenta de que la energía y la mente no están separadas. Sentir, percibir y conocer son fenómenos energéticos. A fin de cuentas, la energía es inteligente. 

Lipman considera que el entendimiento de la energía del budismo tántrico, donde se utilizan una serie de visualizaciones que van ligadas a un proceso de dirigir los pranas por el cuerpo para crear un cuerpo "imaginal" en el que el individuo se identifica con los diferentes budas, tiene un paralelo con la forma en la que Jung entendió los arquetipos (el mismo Alan Wallace en el texto citado anteriormente hace referencia a que el estado de la conciencia basealaya-vijanana accede a una dimensión arquetipal similar al mundo de las formas platónicas o los arquetipos jungianos). Lipman cita a Jung:

Los arquetipos son, al mismo tiempo, imágenes y emociones. Uno puede hablar de un arquetipo sólo cuando estos dos aspectos son simultáneos. Cuando hay meramente una imagen, sólo tenemos una simple figura de poca consecuencia. Pero al estar cargada con una emoción, la imagen gana numinosidad (o energía psíquica); se vuelve dinámica, y de aquí necesariamente emanan ciertas consecuencias.  

A lo que comenta Lipman:
En la práctica del yoga tántrico, la concentración de las sensaciones puede guiar y controlar la energía biológica; la visualización arquetípica puede canalizar la energía emocional; y la presencia pura puede unificar la energía y la mente para lograr un conocimiento más allá del intelecto. Podemos entrenar nuestra energía para que sea más inteligente y a nuestra mente para que esté más enraizada en la energía. 

Herbert Guenther, maestro de Lipman, y controversial traductor, explica en su libro sobre las enseñanzas de Padmasambhava, que para el gran maestro tántrico, "la intensidad vitalizante del núcleo del ser" (snying-po), no es algo que haya nacido o que vaya a morir, está lleno de la propia sustancia de su infinitud. En otras palabras, nuestra energía no es algo que haya nacido o que vaya a morir y tampoco es algo que sea diferente a quien somos, a nuestra conciencia. De hecho, nos dicen estas tradiciones, no somos más que una expresión, una intensidad, de la energía de la totalidad, el punto de intersección o ligamento entre lo abstracto y lo concreto, lo trascendente como inmanencia. Nuestra esencia es la unidad de la conciencia con la energía, y en el reconocimiento de esta naturaleza está el gozo beatífico (el ananda de los hinduistas) o "la intensidad extática", (como traduce Guenther, el término rigpa, la conciencia primordial que es la luminosidad misma del espacio, según el dzogchen). Como escribió Padmasambhava en elBardo Thödol (traducido erróneamente como El Libro Tibetano de los Muertos), "la ignorancia es no reconocer que la luz que ves es el despliegue de tu propio ser" (rangnang).

fuente del texto/Pijamasurf

El Misterios de los Números, Egregores y el nº33, Entrevista a David Topí.




La intuición, impresiones energéticas desde niveles superiores.

intuicion

Ayer fue un día de trasteo constante de principio a fin. La cantidad de polen que hay en el aire estos días, al menos en mi ciudad, colapsó por completo el filtro anti polución de mi coche, de tal forma que se paraba y dejaba de funcionar cada pocos metros, saltando la alarma de fallo de motor. Los dos talleres a los que llamé no podían, por saturación, mirarlo hasta dentro de una semana, algo que era complicado, pues necesitaba el vehículo para las tareas diarias (ir y llevar a los niños al cole, desplazamientos obligados pendientes, etc.). No tenía muy claro que hacer, la verdad, pero tenía la sensación de que debía preguntar en otro sitio que tengo cerca de casa, y aunque sabía que ahí no tratan este tipo de problemas, no se me iba de la cabeza bajar a este otro taller. Así que fuí igual y pregunté. El chico me explicó que ese tipo de filtros, si te metes en autopista un rato a una velocidad constante, va quemando por si solo las partículas sucias y se auto limpia tras un rato de hacerle kilómetros, cosa que no sucedía si solo ibas por la ciudad. Dicho y hecho, me metí en autopista ayer por la mañana, hice casi 100 km ida y vuelta, y el filtro se limpió lo suficiente como para no volver a dar el problema, ni que saltara la alarma del coche más. La intuición, como dice la frase de la imagen, señaló el camino, pues me dio la pista sobre que hacer para solucionar el problema.

Niveles superiores que tratan de comunicarse con la personalidad consciente

En este caso, la pista y las instrucciones venían de “arriba”, de mi Yo Superior, quien impresionó el nombre del taller de al lado de casa en mi cuerpo mental para que lo sintiera fuertemente como la opción a ejecutar. Mi mente lógica sabía que ahí, a priori, no me podían solucionar el tema, pero tampoco perdía nada por preguntar.

Vamos a explicar un poco hoy el modo de funcionamiento que tiene nuestro Yo superior, nuestro ser, nuestros “niveles superiores”, para comunicarse con nuestra personalidad, eso que llamamos intuición, sexto sentido y otras diferentes denominaciones. En general, es bastante sencillo de explicar, pues todo pasa por la transmisión energética de símbolos e imágenes, en su mayor parte, pues son el lenguaje de los niveles superiores y otras partes de la psique, que luego son convertidas en sensaciones, e impresiones, a través de diferentes partes de nuestros cuerpos sutiles. Por ejemplo, si se desea expresar un aviso de alarma porque algún acontecimiento está a punto de ocurrir, y se desea que la mente consciente se haga eco del mismo, se impresiona la imagen del acontecimiento en el cuerpo mental, también en el emocional, de forma que, muchas veces, uno tiene una intuición repentina que pasa del mental a las esferas, y de ahí el presentimiento en forma intuitiva de que algo puede pasar. Cuando alguien es más emocional, y escucha mejor a sus sentimientos, al impresionar la imagen del evento en su cuerpo emocional, se tiene más bien la sensación de que algo puede ocurrir, y si se necesita que el mensaje sea algo muy físico, se puede impresionar en el cuerpo etérico y directamente uno puede hasta sentir un pinchazo en el estómago, o en cualquier parte del cuerpo, como la sensación física de que se tiene que hacer o no se tiene que hacer algo.

Un mecanismo muy poco trabajado

La intuición es un mecanismo muy usado, pero muy poco comprendido. En general, no le hacemos caso porque no sabemos de donde viene, y como no conocemos el origen y la forma en que funciona, simplemente se nos ha condicionado a creer que esas impresiones y sensaciones son pura imaginación, ya que la mente, a través del hemisferio izquierdo, está sumamente programada para no aceptar nada que no pueda comprobar con sus propios sentidos físicos y, por ende, se desecha, pero el hemisferio derecho no funciona así, ya lo sabéis, lo explicamos brevemente en el vídeo sobre el cerebro triuno, así que, desde esas otras partes de nosotros mismos, se intenta que al menos una parte de nuestra composición multidimensional trate de hacer llegar la información hacia la parte que generalmente controla al ser humano en nuestra sociedad occidental.

Cuando se impresiona un tipo de información con tal de incitar a una respuesta por parte de la personalidad no es para violar el libre albedrío, sino para orientar, ya que de todas maneras, la personalidad al estar tan poco consciente de los entornos en los que se mueve, no puede ver mas allá de un pequeño rango de cosas que tiene alrededor, y, por ende, el GPS y brújula que representan aquellas otras partes de nosotros que se mueven en otros rangos vibracionales y energéticos, han de actuar como complemento para que el conjunto de lo que somos pueda guiarse por los avatares y vicisitudes del día a día con la mayor soltura y fluidez posible. Las intuiciones que generan no están destinadas a hacer la vida un camino de rosas, están destinadas a saber circular y navegar por la misma evitando atascos innecesarios, evitando baches o carreteras que no llevan a ningún sitio, porque el conjunto total de lo que somos tiene un destino y unos objetivos en mente, que pasan siempre por el crecimiento, experiencia y aprendizaje de todo, así que cuando la intuición va gritando no hagas esto, o haz lo otro, es simplemente la misma función que nuestro GPS en el móvil que nos dice que ruta tiene más trafico, que ruta es la más corta a nuestro destino, o que ruta presenta en estos momentos lugares impracticables por los cuales es mejor no pasar. Solo así se puede llegar al destino que, en general, nos hemos propuesto de la forma más eficiente.

Aprendiendo a escuchar

La forma de empezar a escucharnos es prestar atención a todas esas sensaciones e intuiciones, si hace falta, incluso anotarlas, “siento que respecto a este tema algo me dice que haga esto”, “siento que por ahí no va bien la cosa…”, “siento que tendría que hacer esto”, etc. Podéis probar a comunicaros directamente con la fuente de la intuición mediante la meditación, la escritura automática, la kinesiología, etc., no nos faltan medios, siempre que no dejéis que los programas instalados en las esferas de “esto no me sirve”, o “esto me lo estoy inventando”, interrumpan esta conexión o desechen su resultado, pues estamos programados para no hacer caso a este tipo de cosas.

La práctica de hacer caso a esa intuición, y la desprogramación de aquello que nos impide hacerle caso, son las dos únicas herramientas que harán que esas impresiones que se intentan transmitir desde niveles superiores a nuestra consciencia racional empiecen a tener hueco y a llegar a mejor puerto cada vez con mayor claridad para que nuestra brújula nos guíe de la forma más adecuada siempre.

El mundo es mucho más complejo de lo que nuestra mente lógica puede abarcar, y nos es necesario hacer caso al resto de partes de uno mismo que abarcan y ven más allá de lo que cada uno de nosotros cree poder ver. La mente consciente solo está programada para actuar en un corto rango de acontecimientos espacio-temporales, en el sentido de que estamos capados para no ver mas allá de nuestros cinco sentidos, y eso nos lleva a tener muchos problemas a la hora de poder dirimir con muchas situaciones que se podrían evitar si supiéramos escuchar a quien tiene una visión algo más amplia. Nuestro subconsciente también es usado para ello, pero en muchos casos, son esas otras partes más elevadas de nosotros mismos quienes impresionan por facilidad de comunicación en esa esfera directamente un mensaje, para que luego pueda ser transmitido a la mente consciente. Hay muchos caminos y formas que se pueden usar, es todo cuestión de que les hagamos caso. Evidentemente, al fin y al cabo la personalidad es la que decide que hacer, nadie se enfada, por decirlo de alguna forma, por que no tomemos en cuenta estos mensajes, simplemente, cuando no lo hacemos, nuestro GPS racional limitado nos llevará por caminos más tortuosos y más lentos o con más baches y tráfico de lo necesario.


fuente/davidtopi.com

La Glándula del Timo. La llave de la energía vital. (Más Ejercicio de Poder del Timo)

La glándula del timo está en el centro del pecho, es una pequeña glándula y es llamada timo. Su nombre en griego, significa thymos energía vital. ¿Qué se necesita decir más después de esto?

Es necesario saber porque el timo sigue siendo una incógnita muy ilustre.Crece cuando estamos felices, y se encoge a la mitad cuando estresamos y más aún cuando nos enfermamos, ¿curioso eh?

Esta característica, es algo que la medicina ha eludido y ha pasado de largo siempre, en lugar de investigarla, se dieron cuenta de que estaba ahí a raíz de realizar autopsias y siempre estaba encogida en estas situaciones, evidentemente…

Siempre han supuesto que es una glándula que se atrofia y deja de funcionar y crecer en la adolescencia, por lo que durante décadas los médicos estadounidenses han bombardeado a rayos X a todo aquel ser humano que ha tenido un “supuesto tamaño anormal” del timo, ya que supuestamente, podría ser algo que les podría traer problemas al paciente.

Más tarde, la ciencia ha demostrado que, incluso después de la reducción del timo que tenemos en la infancia, esta misma glándula que siempre creían inefectiva y que se atrofiaba, se mantenía más viva que nunca en la edad adulta.

Y resulta que es uno de los pilares del sistema inmunológico, junto con las glándulas suprarrenales y la columna vertebral, y está directamente ligada a los sentidos, la conciencia y el lenguaje. Es como un centro de llamadas, a través del cual se hacen todas las conexiones, tanto para afuera como hacia dentro
De manera que si nos vemos invadidos por microbios o toxinas, reaccionamos mediante la producción de células inmunes al mismo tiempo a través de esta glándula. Fijaros si es importante esta pequeñita parte de nuestro cuerpo, también es muy sensible a las imágenes, a los colores, a las luces, los sabores, los gestos, los tonos, los sonidos, palabras o pensamientos.

Amor y odio que afectan profundamente a la glándula timo.

Las ideas negativas tienen más poder sobre el timo que los virus y las bacterias, ya que la negatividad hace que se debilite, y al mismo tiempo debilita también al sistema inmunológico dando paso a los síntomas de baja inmunidad, como por ejemplo, dando lugar a un herpes.

Por el contrario, las ideas positivas mejora los poderes de la glándula timo, recordando la fe que mueve montañas.

Pongamos a prueba a la glándula.

Vamos a intentar de demostrar el poder del timo:

Una su dedo pulgar con su dedo índice, presione con fuerza y pídale a alguien que trate de separarlos mientras piensa y repite mentalmente la frase: “Estoy feliz”. Después repite el proceso, pero pensando “No soy feliz”

La mayoría de las personas van a ver como mientras piensan en positivo, no les pueden separar los dedos, mientras que cuando los pensamientos son en negativo, si que lo pueden hacer y con relativa facilidad.

Esta misma prueba se utiliza para manejar situaciones mucho más complejas.

El detalle curioso es que el timo está muy cerca del corazón que termina absorbiendo todo lo que vivimos en relación con los sentimientos, emociones, decisiones, manera, forma de escuchar, estado de ánimo …

Por lo que intente ser feliz, meditar y sanarse a usted mismo, verá como todo cambia…

fuente/despiertavivimosenunamentira.com